Majestuoso capturado en México…Ver más

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El quetzal es reconocido como una de las aves más hermosas de México y Centroamérica. Posee un gran valor histórico y cultural, ya que estuvo estrechamente vinculado a Kukulkán en la antigüedad.
Los mayas lo llamaban Q’uk’umatz, «La serpiente emplumada». Junto con esta frase, compartieron estas imágenes de un quetzal en vuelo, captadas desde el ángulo perfecto, en la frontera de Corozal, Chiapas, creando una imagen única que rápidamente se viralizó en redes sociales.
Majestuoso quetzal capturado en un vuelo fascinante: un símbolo de belleza en peligro de extinciónNo, no era un dementor, era un hermoso quetzal volando por los cielos.
El 12 de abril, apareció una forma única que recuerda a un Dementor de Harry Potter: se trataba del majestuoso vuelo de un quetzal, capturado por un usuario en una comunidad de Frontera Corozal, Chiapas.
Esta fotografía circuló rápidamente en redes sociales, subrayando la importancia de esta ave, que se encuentra en peligro de extinción.
Dado el ángulo de la fotografía y la distancia, algunos señalaron la posibilidad de que la magia de Harry Potter se filtrara a la vida real, mientras que otros especularon que era una señal de que el ave vagaba sin alma en busca de recuerdos.
Cabe mencionar que en marzo, una de estas aves fue reubicada desde la Ciudad de México, cerca de la delegación Cuahutémoc, a su nuevo hábitat en el Zoológico Miguel Álvarez del Toro.
Esta ave monógama habita en bosques tropicales y subtropicales, alimentándose de aguacatillos, insectos, moluscos, lagartijas y ranas, entre otras criaturas.
Sus depredadores naturales incluyen al tucán esmeralda, ardillas y otros mamíferos nocturnos, así como búhos, halcones y águilas, pero principalmente a los humanos, quienes la capturan para el comercio de mascotas, sin saber que no sobrevive al cautiverio.
A pesar de esto, varios individuos han sido rescatados del cautiverio para ser reintroducidos a la naturaleza. La belleza de esta ave reside en sus ojos redondos y oscuros que le otorgan un aire sereno, una cresta incipiente que corona su cabeza y termina en un pequeño pico amarillo intenso, y sobre todo,
un espectacular plumaje resplandeciente y colorido en el macho, que exhibe tonos iridiscentes de rojo en el vientre, naranja, amarillo, azul y verde esmeralda en el resto de su cuerpo, y en la espectacular cola de cuatro plumas que mide hasta un metro de largo, lo que revela dimorfismo sexual.
La hembra exhibe colores verdes y grises más apagados, sin plumas largas en la cola. Aunque el vuelo de esta hermosa ave deja atónito, los bosques nubosos, áreas de distribución del quetzal, se están reduciendo cada vez más, lo que representa un problema para su población.
Los quetzales eran una de las especies más veneradas en las comunidades mesoamericanas. Actualmente se encuentran en peligro de extinción; sin embargo, aún se pueden avistar varios ejemplares.
Según Mauricio Ruíz Velasco, del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, los mexicas asociaban al ave con la deidad Quetzalcóatl, mientras que en la cultura maya, su contraparte era Kukulkán.
La deidad estaba vinculada al sol y al cielo, también asociado con la libertad. Esta última, al no poder vivir en cautiverio, pues deja de comer hasta morir, explica por qué los quetzales en cautiverio corren mayor riesgo y cómo forman un vuelo único en el cielo entre la niebla.