Se conoció el caso de un joven de 16 años quien había salido de su vivienda a departir con un grupo de amigos un baño en un cuerpo de agua en la vía La Tomatera, zona rural del municipio de Baranoa.
Hacia las 2:45 p. m. del domingo, un adolescente identificado como Luis David Peñate, de 16 años, perdió la vida ahogado en una represa o jagüey ubicado en zona rural del municipio de Baranoa, Atlántico.
El hoy occiso se encontraba en compañía de un grupo de amigos y lo que iniciaría como un encuentro recreativo y de diversión terminaría en tragedia, cuando Luis David se sumergió en el agua, pasaron los minutos y no volvió a salir a flote.
Los otros jóvenes con quienes se encontraba el menor de edad al notar que este no salía, se adentraron al cuerpo de agua en su búsqueda y, al poco rato lo encontraron en el fondo, ya sin vida.
De inmediato lo llevaron a la orilla del lago y trataron de reanimarlo, sin embargo, el adolescente no poseía signos vitales.
Fue así como dieron aviso al resto de la comunidad y a sus familiares, quienes se dirigieron hasta donde está localizado el cuerpo de agua, en la vía La Tomatera, y allí se encontraron con el lamentable desenlace.
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Muere una joven de 15 años tras ser desterrada a un cobertizo por tener la menstruación
Una menor de 15 años ha muerto en Nepal encerrada en un cobertizo al que su familia la mandó por tener la menstruación. No se trata de un hecho aislado, y es que se trata de una tradición del país que se está intentando erradicar.
Roshani Tiruwa, una menor de 15 años y ciudadana de Nepal, ha fallecido después de haber sido desterrada por su familia a un cobertizo por estar en periodo menstrual. Se trata de una tradición que aún realizan en algunas zonas de Nepal y por la cual se consideran impuras a las mujeres que acaban de dar a luz y a las que tienen la menstruación.
Esta tradición está prohibida en Nepal desde 2005, pero pese a ello hay algunas familias que siguen practicándolas, y un ejemplo es la de Roshani. Su fallecimiento se produjo cuando intentó calentarse con un fuego en el interior del cobertizo para calentarse. Sin embargo, el humo que se creó le provocó una intoxicación que acabó con su vida según informa Independent.
El padre de Roshani dijo a los medios locales que había dado la cena a su hija a las 6 de la tarde, y al día siguiente, cuando fueron a ver como estaba, encontraron el cadáver: “Como era sábado, pensamos que había ido a la selva a recoger leña”, explicó a medios locales.
Se trata de la segunda muerte provocada por esta tradición en Nepal en el último mes a pesar de los intentos del país por erradicar este tipo de actuaciones.
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Por una antigua práctica hindú, llamada chhaupadi, las mujeres que tienen la regla o que acaban de dar a luz son vistas como impuras. Aunque esta práctica fue prohibida por el gobierno de Nepal en 2005 aún continúa en áreas rurales occidentales.
El cuerpo de Roshani Tiruwa fue encontrado por su padre el fin de semana pasado en una choza de piedra y barro en el pueblo de Gajra, en el distrito de Achham, a 440 kilómetros al oeste de Katmandú, según informa BBC .
Algunas comunidades en áreas remotas creen que sufrirán una desgracia tal como un desastre natural a menos que las mujeres menstruando estén aisladas. Mientras están en aislamiento se les niega su consumo habitual de alimentos y se les prohíbe beber leche.
En muchos casos las cabañas a las que las mujeres y niñas que están menstruando son desterradas se comparten con el ganado y sus excrementos, e incluso están a cierta distancia de un pueblo. Pueden ser heladas en invierno y sofocantes en verano. Se cree que muchas víctimas de la tradición sufren de enfermedades mentales y físicas de por vida.
Las reglas del chhaupadi significan que una mujer menstruando se enfrenta a restricciones sobre dónde puede dormir, a quién puede ver, a dónde se le permite ir y a quién puede tocar.
Los críticos dicen que el gobierno no ha hecho lo suficiente para erradicar la práctica y que también ha sido lenta para prevenir los matrimonios de niños. Pero los funcionarios sostienen que es difícil prevenir tales abusos cuando están tan profundamente arraigados en la cultura local.