El asiento que nadie quiere… pero que salvó una vida: el misterioso 11A del vuelo de Air India
En la industria de la aviación comercial hay asientos que los pasajeros evitan por comodidad, ubicación o simplemente por superstición. Uno de ellos es el asiento 11A, que, aunque suele ser poco deseado, se convirtió recientemente en foco de atención mundial por una razón inesperada: fue el lugar ocupado por el único sobreviviente del trágico vuelo AI171 de Air India, que sufrió un accidente poco después de despegar desde Ahmedabad con rumbo a Londres.
Este asiento ha sido apodado por muchos viajeros como uno de los menos atractivos de cualquier aeronave, en parte por la fama que arrastra desde aerolíneas como Ryanair, donde el número 11A promete una ventana… que en realidad no existe. En su lugar, hay un panel ciego o una abertura mínima, lo que impide tener vistas al exterior, rompiendo con la expectativa de quienes eligen asiento de ventanilla.
Según explican portales especializados como Flightradar24, esta particularidad no se trata de un error, sino de una consecuencia del diseño estructural de aviones como el Boeing 737-800, donde el sistema de ventilación pasa justo por esa sección del fuselaje. Esto obliga a suprimir la ventana habitual. La falta de vista, combinada con una ubicación que a veces limita el espacio, lo vuelve uno de los menos elegidos por los pasajeros.
No obstante, el destino quiso otra cosa en el vuelo AI171, operado por un Boeing 787-8 Dreamliner, modelo diferente al 737-800 pero igualmente con ciertas coincidencias en configuración. El avión despegó pasadas las 13:30 horas desde el aeropuerto de Ahmedabad, en el oeste de India, y pocos minutos después sufrió un desperfecto que provocó su caída en una zona residencial. La magnitud del siniestro fue devastadora.
En medio del desastre, solo una persona fue hallada con vida: un ciudadano británico de 40 años, que estaba de visita en la India. Según informaron medios locales, los rescatistas encontraron entre sus pertenencias su pase de abordar, en el que claramente figuraba el asiento 11A. La escena de este pasajero caminando tambaleante hacia una ambulancia, en estado de shock pero vivo, recorrió el mundo.
La historia reavivó el eterno debate sobre si la ubicación dentro de un avión puede influir en las probabilidades de supervivencia. Si bien no existe un consenso científico absoluto, algunos estudios previos han sugerido que los asientos cercanos a las salidas de emergencia o en la parte trasera del avión podrían ofrecer una leve ventaja en ciertas situaciones.
En el caso del Boeing 787, el asiento 11A suele estar ubicado cerca del inicio de la clase económica, relativamente próximo a una de las salidas. Esto ha llevado a algunos analistas a especular que esa cercanía podría haber sido un factor que facilitó su salida del avión tras el impacto. Aunque, como en muchos casos de este tipo, el azar también parece haber jugado un papel crucial.
La historia del 11A pasó de ser una curiosidad aeronáutica a un símbolo de lo improbable. El asiento criticado por carecer de ventana, por no ofrecer la mejor vista ni el mayor espacio, terminó siendo el lugar desde donde una persona logró sobrevivir a una de las peores tragedias aéreas recientes. Ahora, lo que antes era un número evitado por costumbre, será recordado como un punto exacto donde la vida venció a la fatalidad.
11-A: por qué ese asiento pudo haber salvado la vida del único sobreviviente del Air India
- Un avión de Air India se estrelló en una zona residencial poco después del despegue. Murieron al menos 268 personas.
- Clarín habló con especialistas para entender cómo se salvó el único pasajero sobreviviente.